Blog ONAC - De la leña a la eficiencia: La importancia de la Infraestructura de Calidad en la cocción limpia
De la leña a la eficiencia: La importancia de la Infraestructura de Calidad en la cocción limpia
X
LinkedIn
Email

De la leña a la eficiencia: La importancia de la Infraestructura de Calidad en la cocción limpia

Elaborado por: Coordinación de Investigaciones Económicas y Sociales para la Infraestructura de la Calidad.
Organismo Nacional de Acreditación de Colombia – ONAC

Resumen Ejecutivo

Este estudio aborda la transición de métodos tradicionales de cocción, que utilizan combustibles sólidos como la leña y el carbón, hacia tecnologías más limpias y eficientes. La cocción limpia no solo reduce la contaminación del aire interior, mejorando la salud al disminuir enfermedades respiratorias y cardiovasculares, sino que también tiene beneficios ambientales al reducir la deforestación y las emisiones de gases de efecto invernadero. 

Antecedentes

Las certificaciones de sistemas de gestión, como ISO 9001, ISO 14001, ISO 45001 e ISO 22000, aseguran que los procesos y sistemas de gestión en la producción y distribución de estas tecnologías cumplan con altos estándares de calidad, seguridad y sostenibilidad. Además, la certificación de productos y procesos garantiza que las tecnologías de cocción limpia, como estufas y combustibles, cumplen con los requisitos de seguridad y eficiencia, evaluando su rendimiento energético y la reducción de emisiones contaminantes.

Objetivo

El objetivo principal del documento es destacar la importancia de la transición hacia tecnologías de cocción limpia mediante el uso de combustibles y equipos eficientes, y cómo la infraestructura de calidad, respaldada por normas y certificaciones, es esencial para garantizar la seguridad, eficiencia y sostenibilidad de estas tecnologías. Esto busca mejorar la salud pública, proteger el medio ambiente y promover el desarrollo sostenible en Colombia y a nivel global.

Alcance

 El documento describe la situación en Colombia, detallando la dependencia histórica y actual del país en combustibles sólidos para cocinar y los esfuerzos nacionales, como el Plan Nacional de Sustitución de Leña, para promover combustibles más limpios. Asimismo, resalta la importancia de la infraestructura de calidad, incluyendo la certificación y acreditación de equipos y procesos, para garantizar la seguridad, eficiencia y sostenibilidad de las tecnologías de cocción limpia. Finalmente, detalla cómo las normas ISO y otras certificaciones aseguran que estas tecnologías cumplan con altos estándares de calidad y seguridad.

1. Introducción

La cocina o cocción limpia se refiere al uso de combustibles limpios y tecnologías energéticamente eficientes para la preparación de alimentos. Este paradigma busca reemplazar los métodos tradicionales de cocción, que a menudo utilizan combustibles sólidos como la leña, el carbón, el carbón vegetal o el estiércol animal. Estos combustibles, cuando se queman en estufas o fogones mal ventilados, liberan grandes cantidades de contaminantes al aire, incluyendo partículas finas y monóxido de carbono, que pueden ser perjudiciales para la salud. La exposición prolongada a estos contaminantes está asociada con una variedad de problemas de salud, tales como enfermedades respiratorias, cardiovasculares e incluso cáncer.

 

Además de los impactos en la salud, los métodos tradicionales de cocción también tienen efectos ambientales adversos. La recolección de leña contribuye a la deforestación, la pérdida de biodiversidad y la degradación del suelo. Asimismo, la quema de biomasa genera emisiones de gases de efecto invernadero, lo que agrava el cambio climático. En contraste, la adopción de tecnologías de cocción limpia, como estufas eficientes y combustibles como el gas licuado de petróleo (GLP), la electricidad o los biocombustibles modernos, puede reducir significativamente estos impactos. Estas alternativas no solo mejoran la calidad del aire en interiores y reducen los riesgos para la salud, sino que también disminuyen la presión sobre los recursos naturales y contribuyen a un ambiente más sostenible.

Los aspectos clave de la cocción limpia incluyen:

 

  • Estufas y Cocinas Mejoradas: utilización de estufas que queman combustible de manera más eficiente y con menos emisiones en comparación con los fuegos abiertos tradicionales o estufas rudimentarias.

 

  • Combustibles Limpios: adopción de combustibles que producen menos contaminantes, como gas licuado de petróleo (GLP), gas natural, biogás, etanol, electricidad y energía solar.

 

  • Beneficios para la Salud: la reducción de la contaminación del aire interior disminuye significativamente el riesgo de enfermedades respiratorias, condiciones cardiovasculares y otros problemas de salud, especialmente entre mujeres y niños que a menudo están expuestos al humo de la cocina.

 

  • Impacto Ambiental: disminución de la deforestación y la degradación forestal debido a una menor dependencia de la leña y el carbón vegetal, junto con una reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero.

 

  • Beneficios Económicos y Sociales: ahorro de tiempo gracias a métodos de cocción más rápidos y a la reducción de la necesidad de recolectar leña, lo que puede liberar tiempo para la educación y otras actividades productivas, especialmente para mujeres y niños.

 

  • Seguridad: reducción del riesgo de quemaduras y otras lesiones asociadas con los métodos tradicionales de cocción.

Se estima que 2300 millones de personas en el planeta aún usan combustibles sólidos para cocinar en estufas ineficientes y fogatas. La gran mayoría de estas personas viven en países de ingresos medios y bajos. Esto genera polución de aire en los hogares, lo que causa problemas respiratorios, enfermedades cardiovasculares, ataques cerebrovasculares y cáncer de pulmón entre otros. Aproximadamente 3.2 millones de personas mueren al año por enfermedades atribuidas a esta polución[1].

 

Existe una marcada desigualdad de género en relación con la problemática de la contaminación del aire en los hogares. Se estima que un 60% de las muertes vinculadas a esta contaminación afectan a mujeres y niños, quienes son los más vulnerables. Las mujeres, en particular, pueden llegar a dedicar hasta 18 horas a la semana a la recolección de combustible para la cocina. Este tiempo podría ser empleado en actividades más productivas, como la educación o trabajos que generen ingresos económicos[2], lo que subraya la carga desproporcionada que enfrentan debido a roles de género y expectativas culturales preestablecidas. La dedicación de tanto tiempo a esta tarea no solo afecta su salud física, sino también su bienestar y oportunidades de desarrollo personal y profesional.

 

Históricamente, Colombia ha dependido de la leña y el carbón vegetal como principales fuentes de energía para cocinar. Durante un tiempo, se utilizaron cocinas económicas que incluían parrillas, ceniceros y tuberías diseñadas para conducir el humo hacia la chimenea. Con la llegada del siglo XX, se introdujeron nuevas tecnologías como las estufas de gas, las estufas eléctricas, los hornos de convección y, más recientemente, el microondas[3]. Estos avances han transformado significativamente la forma en que se cocina en las zonas urbanas.

 

De acuerdo con datos del DANE, en los centros urbanos más de 11 millones de hogares utilizan principalmente gas natural, seguido del gas en pipeta. Sin embargo, en las áreas rurales, la situación es diferente. Aproximadamente 1.8 millones de hogares utilizan gas propano en pipeta y 1.4 millones de hogares rurales todavía dependen de la leña o la madera para cocinar. Esta dependencia de métodos tradicionales aumenta considerablemente la exposición a la contaminación del aire en el hogar, lo que representa un serio riesgo para la salud de sus habitantes. La distribución de estos métodos de cocción y su impacto en la salud pública pueden observarse en la gráfica 1.

 

Hay proyectos en el país que buscan combatir este fenómeno. La Unidad de Planeación Minero Energética (UPME) ha desarrollado el Plan Nacional de Sustitución de Leña (PNSL) como una guía técnica para facilitar la transición del sector energético hacia el uso de combustibles más limpios y eficientes en la cocción doméstica en Colombia. El plan tiene como objetivo reemplazar combustibles ineficientes y altamente contaminantes como la leña, el carbón, el petróleo y otros materiales nocivos para la salud pública y la calidad del aire. La meta principal es que para 2050 todos los hogares cuenten con alternativas energéticas limpias. El PNSL establece un plan de acción basado en cuatro pilares fundamentales, que se dividen en objetivos y acciones específicas a iniciarse de inmediato (2023) y lograrse en el corto plazo (2026), mediano plazo (2030, en línea con los compromisos del Acuerdo de París y los ODS), y largo plazo (2050, en consonancia con la Estrategia Carbono Neutral)[1].

Gráfico 1: Hogares que preparan alimentos de acuerdo con el combustible (energía) que utilizan para cocinar.

Tipo de combustible                                                                                                                                                                   

                                                                Total hogares en miles

Fuente: DANE. Cálculos propios, Coordinación de Investigaciones Económicas y Sociales para la Infraestructura de la Calidad.

La infraestructura de la calidad es crucial en la implementación de cocinas limpias por varias razones:

 

  • Garantía de Seguridad y Eficiencia: Asegura que los equipos y tecnologías utilizados en las cocinas limpias cumplen con estándares de seguridad y eficiencia, minimizando riesgos de accidentes y optimizando el uso de recursos.

 

  • Mejora de la Salud Pública: La infraestructura de la calidad asegura que las tecnologías de cocina limpia emiten niveles mínimos de contaminantes, reduciendo así la exposición a humos tóxicos y mejorando la salud respiratoria de las personas.

 

  • Confianza del Consumidor: Establecer y adherirse a estándares de calidad genera confianza en los consumidores, incentivando la adopción de nuevas tecnologías al saber que son seguras y efectivas.

 

  • Acceso a Mercados Internacionales: Cumplir con estándares internacionales facilita la exportación e importación de tecnologías de cocina limpia, permitiendo acceso a las mejores soluciones disponibles globalmente.

 

  • Fomento de la Innovación: La infraestructura de la calidad impulsa la investigación y el desarrollo, promoviendo la creación de tecnologías cada vez más eficientes y menos contaminantes.

 

  • Cumplimiento Regulatorio: Ayuda a los fabricantes y proveedores a cumplir con las regulaciones locales e internacionales, evitando sanciones y asegurando la sostenibilidad de las iniciativas de cocina limpia.

 

  • Evaluación y Mejora Continua: Permite la evaluación continua de las tecnologías de cocina limpia y su impacto, facilitando ajustes y mejoras en su diseño y funcionalidad.

 

  • Acreditación: La acreditación de laboratorios, organismos de certificación o inspección, garantiza que las pruebas realizadas a los equipos, instalaciones de cocina limpia se realizan con precisión y fiabilidad. Esto asegura que solo las tecnologías que cumplen con los más altos estándares de calidad y desempeño lleguen al mercado, fortaleciendo la confianza del consumidor y fomentando la adopción de prácticas sostenibles.

 

Por ejemplo, una familia en Cali que cocina con una estufa a gas, aunque no lo sepa, se beneficia de la acreditación de ONAC. Este hogar debe realizar la Revisión Periódica Obligatoria cada cinco años, en la cual interviene un OEC acreditado por ONAC. La empresa encargada de la distribución y comercialización del gas para la cocina probablemente esté certificada en sistemas de gestión, según los estándares del sector IAF 26 – suministro de gas. Además, en estos procesos participa personal calificado y certificado en competencias para la instalación, mantenimiento y reparación de artefactos a gas de uso residencial.

 

De esta manera, la acreditación actúa como garantía de que la certificación de todos los participantes en el proceso cumple con los estándares adecuados. Esto asegura que el gas que llega a la familia vallecaucana sea seguro, con una instalación adecuada que prevenga accidentes y problemas de salud.

ONAC, en calidad de acreditador de la infraestructura de la calidad colombiana, ofrece múltiples alcances relacionados con la cocina limpia en los esquemas CSG, OCP, CPR y OIN, a saber.:

Certificación de Sistemas de Gestión (CSG):

  • Bajo este esquema, los OECs pueden acreditarse en normas ISO 9001, ISO 14001, ISO 45001, ISO 22000, en los siguientes sectores técnicos relacionados:

     

    • Sector IAF 25 – Suministro de electricidad.
    • Sector IAF 26 – Suministro de gas,
    • Sector IAF 26 – Comercio al por mayor y al por menor; Reparación de vehículos de motor, motocicletas y artículos personales y de uso doméstico.[1]

     

    Sin embargo, también hay esquemas de certificación que pueden ser implementados en las cadenas de valor relacionada con la cocina limpia, como la ISO 55001 Sistema de Gestión de Activos, ISO 55001 Sistema de Gestión de Eficiencia Energética, Sistema de Gestión de la Energía – ISO 50001, ISO 39001 Sistema de Gestión de Seguridad Vial, aunque no están limitadas a estos.

Organismos de Certificación de Personas (OCP):

Los OECs realizan la certificación de la competencia de las personas, en los siguientes alcances acreditados por ONAC, relacionados con la cocina limpia:

 

  • Inspector de instalaciones eléctricas (hay varias categorías de instalaciones: distribución, generación, uso final, etc.).
  • Inspector de instalaciones para el suministro de gas a usuarios residenciales y comerciales.
  • Instalador de sistemas para el suministro de gas combustible en edificaciones residenciales y comerciales
  • Operador sistema de trasiego de GLP a granel.
  • Operador sistema de trasiego de GLP en planta.
  • Persona competente para el manejo seguro de contenedores en la distribución de GLP
  • Persona competente para evaluar sistemas de GLP.
  • Persona Competente para hacer mantenimiento de Redes Energizadas Media Tensión
  • Persona competente para instalar sistemas de GLP
  • Persona competente para mantener y reparar artefactos a gas para uso residencial y comercial.
  • Persona competente para soldar tuberías (instalaciones de gas)
  • Persona competente para envasar cilindros para almacenamiento de GLP
  • Reparador de artefactos a gas uso residencial y comercial.

Organismos de Certificación de Productos, Procesos y Servicios (CPR):

ONAC también acredita OECs dedicados a la certificación de productos, procesos y servicios relacionados con cocina limpia, en los sectores IAF de suministro de electricidad, bajo las categorías de producción, transporte, distribución y comercio de energía eléctrica, además del suministro de gas, donde participan las categorías de producción de gas, distribución por tubería de combustibles gaseosos y comercio de gas por tubería.

Organismos de Inspección (OIN):

ONAC también realiza acreditación a OECs que ofrecen servicios de inspección requeridos en cualquier tipo de instalación, equipos, elementos, bienes y/o servicios, abarcando diferentes etapas del ciclo de vida de estos ítems, incluyendo la etapa del diseño[1]. Para el caso de la cocina limpia, abarcan los ámbitos de inspección de instalaciones para el suministro de gas combustible y el de inspección de instalaciones eléctricas.

 

Laboratorios de Ensayo (LAB):

ONAC también lleva a cabo acreditaciones según el Reglamento Técnico de Etiquetado (RETIQ), emitido por el Ministerio de Minas y Energía en 2015, además de normativas nacionales emitidas por ICONTEC. Los laboratorios y organismos acreditados evalúan el consumo y rendimiento energético de estufas eléctricas, microondas y otros electrodomésticos de cocina, de acuerdo con normas como RETIQ, NTC 4855-1:2020 y NTC 4855-2:2020 (Artefactos eléctricos de cocción para uso doméstico), NTC 2832-1:2020 y NTC 2832-2:2019 (Gasodomésticos para la cocción de alimentos), así como la norma NTC 6358:2019 (Estufas de biomasa para cocción de alimentos). De esta manera, se asegura que estos dispositivos cumplan con los estándares establecidos por las normativas internacionales.

Conclusiones

En resumen, la infraestructura de la calidad es esencial  para la transición hacia tecnologías de cocción limpia en Colombia y en el mundo. A través de la acreditación, la evaluación de la conformidad (certificación e inspección), se asegura que los equipos y procesos empleados en la cocción limpia cumplan con altos estándares de seguridad, eficiencia y sostenibilidad. Esto no solo protege la salud de millones de personas, especialmente de aquellos en situación de vulnerabilidad, sino que también impulsa la innovación, fortalece la confianza del consumidor y abre mercados internacionales. En este sentido, la infraestructura de la calidad es crucial para alcanzar los objetivos de desarrollo sostenible, reducir la pobreza energética y mitigar los efectos del cambio climático, consolidando un futuro donde la preparación de alimentos no comprometa la salud humana ni el equilibrio ambiental.

Bibliografía

  1. World Health Organization Household air pollution  https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/household-air-pollution-and-health

  2. 5  Things to know about clean cookink https://undp-climate.exposure.co/5-things-to-know-about-clean-cooking

  3. Ministerio de las Culturas https://www.mincultura.gov.co/Sitios/patrimonio/bibliotecas-de-cocinas/tomos/tomo14.pdf
  4. Unidad de Planeación Minero Energética, Plan Nacional de Sustitución de Leña https://www1.upme.gov.co/sipg/Paginas/Plan-nacional-sustitucion-le%C3%B1a.aspx

  5. En este sector técnico es posible encontrar OECs que realizan certificación en “Comercio al por mayor de combustibles sólidos, líquidos y gaseosos, y productos similares”.

  6. Organismo Nacional de Acreditación, Organismos de Inspección https://onac.org.co/servicios/organismos-de-inspeccion/

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Últimos artículos:

Confirmar estado de la acreditación

Verifica el estado en que se encuentra una acreditación, escribiendo a continuación, el código de acreditación: